A través de la Asociación Cultural de Jubilados se organizan unos cursos para la gente del pueblo, lo que supone un aliciente y un entretenimiento para pasar las largas horas del invierno, reunirse, charlar y no estar sólo en casa pensando en Dios sabe qué. Ya está funcionando un curso de manualidades en el que se hacen pintura al óleo, cestas de mimbre, tapetes y manteles pintados, los martes por la tarde. También tienen servicio de podólogo y peluquería. Próximamente comenzarán unas clases de gimnasia para que todos (más bien todas, ya que son las mujeres mayoritariamente las que más se sirven de estos cursos y servicios) estén sanos y en plena forma.